La ilusión fue tan hermosa como irreal
La ilusión es un estado de ánimo que no tiene fundamento real
Está basada en sucesos y hechos que se alinean en la cotidianidad para agigantarla.
Todo hace que esa ilusión crezca,
Una foto, un número, una acción, una historia y hasta una estadística.
Todos buscamos algo para mantenerla.
Mientras la ilusión se va alimentando de todos esos hechos, comienzan a aparecer síntomas de inmunidad , que rozan en actos fantásticos.
Nos suben las endorfinas, la serotonina, el cortisol, la adrenalina
Nuestros pensamientos se convierten en hechos y acciones positivas, no dormimos, no comemos, estamos verborrágicos, exultantes, tocamos el cielo con las manos
Pero esto no es un hecho aislado, esa ilusión se expende como un virus atravesando, edades, sexos, religiones, países.
Convirtiéndose en una verdadera pandemia.
Y es el punto cúlmine, donde la eclosión de esa esperanza nos hace invencibles, no tenemos dolor, no se sienten los golpes, ni los sables más amenazantes nos bajan de ese éxtasis.
Luego viene el futbol, ese bendito deporte, también el partido, y allí le agregamos a la ilusión el aliento constante, que desde nuestro entender todo lo puede.
Pero los hinchas juegan, juegan su partido, el del empuje, y la transmisión de su ilusión, a los jugadores y técnicos.
Ellos tienen que lidiar entre el profesionalismo y la pasión, a veces se está a la altura futbolística o más y a veces no, no alcanza el aliento, ni la transmisión de esperanza constante
La ilusión fue tan hermosa como irreal.
Boca es grande por su gente, es el movimiento más importante de este hermoso país
Mañana renovaremos la ilusión, esperando que esta vez sea respaldada por una tangible realidad