Analizando al próximo rival: Jorge Wilstermann.
El Xeneize arranca la Copa Libertadores y con eso comienza una nueva ilusión. Una ilusión que ya lleva 12 años (ese es el tiempo que el hincha de Boca espera ganar la séptima Libertadores) y que ya casi es una obsesión. 2 finales perdidas (Una contra el máximo rival), 2 semis y algunas derrotas en Octavos son el balance de estos años de Boca. Gustavo Alfaro llego para darle a Boca esa tranquilidad y solidez que se necesita para las fases de eliminación directa, pero para eso falta. Mañana Boca debuta por fase de grupos en Bolivia contra Jorge Wilstermann, en un partido que seguramente será difícil. El equipo Boliviano no ha perdido en los últimos años de Local por torneos internacionales, acumulando 6 triunfos y 3 empates en los últimos 4 años. La altura y una buena forma de aprovecharla, le han permitido derrotas rivales pesados como Peñarol (6 a 2 en 2017) Palmeiras, Atlético Mineiro, River ( 3 a 0 en 2017) y Vasco Da Gama ( 4 a 0 en 2018).
Como llega Wilstermann?. El equipo de Miguel Portugal llega a este encuentro en el 5to puesto en el torneo Boliviano, dejando muchas dudas. 4 triunfos, 2 empates y 4 derrotas son los números del equipo, que está a 8 puntos de Nacional Potosi en la punta y es muy criticado en Bolivia. En el mes de Febrero jugo 6 partidos de los cuales gano 2, empato 1 y perdió 3. Además recibió goles en los últimos 5 partidos (8 goles). Sin dudas no es el momento ideal del equipo, pero para la Copa Libertadores cambia algo: Puede utilizar a todos sus extranjeros y con ello podrá utilizar a Lucas Gaucho y Ariel Núñez que por tema de cupos no son tan utilizados en el torneo boliviano. Ellos no son las figuras, ni mucho menos pero le dan más variantes al técnico de cara al partido contra Boca.
Como juega Jorge Wilstermann? Generalmente el esquema es un 4-2-3-1 o 4-4-1-1, dependiendo de la altura donde logren ubicarse Ariel Núñez y Serginho, que son quienes juegan por afuera. En el arco y en defensa no se ven demasiados cambios con respecto al equipo en jugo en 2017 contra River, incluso pueden ser casi los mismos que jugaron en el 3 a 0 en Bolivia, sacando el cambio de Jorge Ortiz, que ese día jugo de lateral y mañana jugará en el medio: Giménez; Melean, Da Silva, Zenteno, Aponte. En el doble 5 seguramente aparecerán Saucedo y Jorge Ortiz. Delante de ellos la parte fundamental del equipo, la parte de generación de juego, de talento del equipo: Ariel Núñez por derecha ( es un extremo paraguayo rápido de buen 1 contra 1), Pochi Chávez ( Juega libre detrás del 9 y tirándose a los costados, es el encargado de manejar el equipo) y por izquierda el mejor jugador del equipo Serginho ( El 10 brasilero es el mejor jugador del equipo y en la altura es capaz de enloquecer a cualquier lateral y ser imparable). Como Centro delantero en los últimos entrenamiento jugo Lucas Gaucho (Un delantero Brasilero que llego el año pasado a Bolivia y convirtió muchos goles. Es un delantero con variantes capaz de definir de derecha o izquierda con la misma facilidad) pero también puede jugar Gilbert Álvarez (el otro goleador del equipo que fue importante en el titulo conseguido el año pasado).
Es un 4-2-3-1 o 4-4-1-1 en defensa. En la delantera puede jugar Gaucho o Gilbert Alvarez. En los ultimos partidos venia jugando de central Montero pero parece que jugara Zenteno (Volvió hace poco de suspension por doping)
El equipo de Miguel Portugal intentará aprovechar la altura como lo hace siempre contra equipos que no están acostumbrados. Intentará sacar ventajas de los momentos de ahogo del rival y ahí aprovechar los espacios con Serginho contra Buffarini, la movilidad de Pochi Chávez y la capacidad goleadora del 9 que juegue. Además intentara aprovechar al máximo la pelota parada, porque es algo que utilizan muy bien con la pegada de Serginho o de Pochi. La clave de ellos seguramente sea el 10 y su duelo contra Buffa, en el resultado de ese duelo quizás este la definición del partido porque el Brasilero es la primera opción de ataque siempre y tiene una gran capacidad para desequilibrar y desbordar e incluso para definir.
Cuáles serán las claves del partido: 1º- La altura. No es tanta altura como en otros escenarios, pero igualmente todos los rivales lo sufren. Falta el aire igual, la pelota vuela rápido y además el estado del campo de juego no es lo mismo que en la Bombonera. Veremos cómo Boca afronta el partido para intentar sufrir lo menos posible las consecuencias de jugar en el Capriles. En los momentos de ahogo debe tratar de tener el control de partido y de la pelota. 2º- Serginho. El 10 en muchos partidos de local se puede tornar imparable. Ya está adaptado a jugar ahí y tiene talento de sobra como para desequilibrar. Buffarini debe tener cuidado y Boca como equipo también. Si Alfaro deja todo librado a que Buffarini gane en el 1 contra 1 seguramente va a tener muchos problemas. 3º- Control de pelota de Boca. Lo mejor para enfrentar la altura es tratar de manejar el partido y asegurando la pelota. Reynoso, Tevez, Marcone y Almendra tendrán que tratar de juntarse, asegurar la pelota para que el rival no pueda poner a correr a Serginho o Núñez en cada perdida. 4º- Pelota parada. En los últimos partidos de Wilstermann se vieron muchos goles de pelota parada, tanto a favor como en contra, por lo que seguramente la altura y que vuele un poco más la pelota hacen que sea más difícil defenderla. Serginho y Pochi le pegan bien y Zenteno principalmente o Gilbert Álvarez la aprovechan muy bien. Andrada, Licha e Izquierdoz deben estar muy atentos. 5º- Dudas de los centrales de Wilsterman. Da Silva y Zenteno son centrales muy limitados y lentos. Darío Benedetto y Carlos Tevez deben estar atentos porque en algún momento puede aparecer un error que les permita quedar mano a mano con Giménez.
Boca y una visita de riesgo. Wilstermann no tiene jerarquía individual y da muchas facilidades cuando sale de Cochabamba pero de local es otro. Boca debe hacer un partido inteligente y tratar de exponer la diferencia de jerarquía individual cuando pueda. Un triunfo para comenzar esta fase de grupos será clave para no sufrir sobresaltos después.
